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sábado, 21 de noviembre de 2015

Valsecito criollo

Los valsecitos son la alegría de la milonga. Tres minutos donde florecen los cuerpos y los pies. La historia de la danza del tango es tan linda, tan interesante en todos sus bosquejos, que los músicos y cantantes supieron adosarle la milonga y el valsecito a los atriles. Sobre parecidos supuestos bailables, aunque el vals se bailaba al principio con simples giros. Fue a comienzos de los años cincuenta cuando se lo aderezó con figuras de tango, alternando con los giros.

Cuando suenan los valsecitos en los altavoces de la milonga, la pista se puebla de sonrientes parejas dispuestas a disfrutar al mango toda esa alegría, el candor, la sensación de fiesta que traen esos compases tan familiares al oído. Además el catastro tanguero acarrea una cantidad muy grande y sentimental de esos valsecitos que nos  transmiten alegría y amor. Francisco García Jiménez en su Valsecito criollo -que lleva música del ex pianista de D'Arienzo, Lidio Fasoli- lo expresa así.

                                      

Canción sentimental, / canción de amor y juventud, / humilde y bella flor / de mi inmortal barrio del sur. / Querido valsecito / de los primeros sueños, / de la primera novia, / de la ilusión azul... / Bailando con tu son /  iban los pies y el corazón; / dichoso de vivir / en la cabeza había un zorzal, / rimando con las notas / de tus violines tiernos, / de tus guitarras criollas / querido y viejo vals...

Y lo escucho por la orquesta de D'Arienzo del 37, y mi cabeza se va con esas notas alegres y emborrachantes de ilusión, de alegría. Por supuesto, lo he seleccionado para esta noche en BIEN MILONGA, la que desarrollamos todos los sábados y martes, desde las 21 horas, en la CASA de ARAGÓN de Madrid, en la Plaza de la República Argentina número seis. (Pza. de los Delfines)

Y como aperitivo, aprovecho para darme una vuelta por pistas lejanas para ver bailar a milongueros de todas partes que se han entregado en cuerpo y alma al tango.

Por ejemplo, podemos apreciar en el Shangai Tango Festival Chinese a Gustavo Lin y Catarina Chung. Se mandan con el tango Emancipación por la orquesta de Osvaldo Pugliese.





Y ahora pasando por Seúl (Corea) me engancho con la excelente pareja que forman Francisco Forquera y Carolina Bonaventura que se lucen con la milonga-candombe Tango Negro, por Juan Carlos Cáceres y su orquesta.

                                        

Y me quedo un rato en la Milonga "Nocturne" de Nueva York. Alli veo cómo se lucen Eleonora Kalganova y Michael Nadtochi, bailando precisamente el Valsecito Criollo, del título, por Juan D'Arienzo y su enganchadora orquesta.
   



 

Si estos valsecitos no te iluminan la giornata, apaga y vámonos.                                                                

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