En un día como el señalado, cabe incorporar la poesía al blog. El tango está lleno de versos paradigmáticos y entrañables. Pero voy a hacer una excepción y en este caso recurriré al estro de un tanguero sin chapa de poeta, pero con una capacidad inusual para componer versos de todo tipo. Hoy les traigo dos, uno en lunfardo y otro de estilo gauchesco para que apreciermos mejor el numen de Miguel Miqueo, que de él hablamos.
Cruzando el disco
Me voy de atorro al sobre de madera;
caerá el telón de la función mistonga.
El folletín finisha. !No hay más conga!
y viá piantar de acá como cualquiera.
Si la viví de prima o bien
fulera
dirá el color del vidrio que me ponga;
toda mi davi fué rante milonga
que yo bailé sin grupo, a mi
manera.
¿Y ahora, qué…? Me han ortivao, che
garca,
que andás de aprontes pa’ probar
mi ropa.
Voy a batirte el justo con mi marca…
No te manqués por cirujearme el arca;
manyá gilún que acá estamos de sopa.
!Gana al galope el del Stud “La Parca”!.
El mandado.
Che Pancho, vení un momento;
te preciso pa’ un mandado.
Andáte del gringo Antonio
y que te dea “anotado”.
Tráime un kilo ‘e yerba Salus
y pa no andar despeinado,
un frasco medio morrudo
de la gomina Brancato.
Que te dea lo de siempre
tratándose de tabaco,
La
Tecla, La hija del Toro
y de Brasil dies atados.
Una boteya ‘e Ferné
pa’ tomar con el Sinsano
y algunas velas Ranchera
pa’ que tenga lus el rancho.
Trái del jabón Federal
unos cuantos panes blancos;
Puloi y algo ‘e querosén
p’al Primus que está ái guardado.
Y si al gringo no le afeta,
que me mande -pero al fiado-
un par del alpargatas Rueda
que sean del cuarenta y cuatro.
Después vas pa’ la botica
que queda del otro lado
y me tráis unos Jenioles,
alcol y bicarbonato.
Y no te olvidés de alsar
-si te fía el boticario-,
una Manesia de Filis,
porque ando medio empachado.
Seguro vas a tener
bastante yenas las manos;
pero siempre hay un lugar
si hay voluntá y entusiasmo.
Así que andá a lo del Tito
-que pa’l Faber es un mago-
y que me anote al dieciocho,
lo que dea al cero cuatro.
Eso pa’ la Nasional,
siempre al fiambre, y otro tanto
pa’ la de Montevideo,
porque ando bien palpitando.
Como el Tito es hombre ‘e ley,
vos pedile de emprestados
unos chorisos caseros,
un poco ‘e pan y vinacho.
Desiles a todos eyos
-tipos siempre solidarios-,
que cobro la redoblona
y voy corriendo y les pago.
Que estoy un poco en la mala
por la falta de trabajo,
con motivo de la crisis
que estamos atravesando.
Pero que si yega a darse
el pique que ando buscando,
paso al frente como Legui
con la fusta abajo ‘el braso.
Lo que pasa es que, al momento,
escasean esos trabajos…
y piden pocos Jerentes
en casi todos los Bancos
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