Me acuerdo de mi Argentina: un país de psicólogos donde andan todos medio locos por una u otra causa. Hay gente que todavía no cayó en cuenta del hermoso país en que le tocó vivir y sufre por los avatares políticos de todo signo o por la epidemia de golpes de estado que ponen la casa patas p'arriba. Me parece que el tango nació tristón y nostálgico, precisamente por causa de tantos bajones que acusan sus habitantes, por culpa de sus malos dirigentes y esa manía de querer ser satélites de la superpotencia. Como si no tuviéramos elementos de sobra en Sudamérica para ponernos los largos.
Bueno, vamos a dejar de lado la política porque me acuerdo de Discépolo, me embalo y me olvido de la actividad de esta página. Hoy, para solazarnos les traigo a esta pareja integrada por Michelle Marsidi y Joachim Dieteker, que nos dan una visión de elegancia y savoir faire, en la pista. Amén de la musicalidad al mango, como premisa básica. Compás y elegancia, la fórmula mágica.
Y se arrancan, bailando en la alemana ciudad de Bielefeld, durante un Festival. Y lo hacen con la orquesta rusa: Solo Tango que los acompañan en el tango: Invierno, a la manera de Canaro.
Ahora están en el Tango Festival Internacional Spirit. Y giran al compás de la orquesta de Enrique Rodríguez, con su cantor Armando Moreno y el valsecito, En el Volga yo te espero.
Y nos vamos a la punta de la Bota Itálica, donde Sicilia se despega, y el Catania Tango festival de este año se emborracha de tango y baile. Allá se lucen bailando la milonga Mi Buenos Aires por la orquesta de Francisco Canaro.
Precioso. Gracias.
ResponderEliminarte tendria que mandar saludos retroactivos es que no entendia porque no podia dejarte mensajes con esas cuadriculas que mi lentitud no descifraba saludos juan de boedo un ferviente seguidor
ResponderEliminarHola Henar, Chau Juancho, un gusto tenerlos por aquí... chamuyando...
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