jueves, 12 de marzo de 2015

Adolfo Carabelli

Aunque no haya sido un tanguero de pura cepa, este pianista nacido en San Fernando a orillas del Río de la Plata, formado académicamente como pianista de altos vuelos, pasaría a la historia de la música popular por haber dirigido la Orquesta del Sello Victor, bajo su nombre, por indicación de este sello y dando comienzo a una sucesión de conjuntos bajo el paraguas de la misma discográfica, que tuvieron un tono distinto, particular que sigue vigente en el gusto de los bailarines.

Carabelli fue enviado por sus padres a Italia para perfeccionarse cuando tenía 15 años. Permaneció allí, y en el Conservatorio de Bologna, recibiría lecciones de grandes maestros de la época musicalmente gloriosa de dicho país. Se recibió con todos los plácemes de sus profesores y al regreso, con 21 años, seguiría estudiando con Alberto D'Erasmo entre otros, lo que le permitiría alcanzar un nivel muy alto, que a la hora de incursionar en la música popular se haría notar y cómo.

                                                       


No era ésa la meta de Carabelli que tocaría la música clásica en un Trío, en confiterías distinguidas donde las damas iban a tomar el té, en salones y lugares de expansión nocturnos. Cuando llegó el jazz al Cono Sur, Carabelli se entusiasmo con este ritmo, a tal punto, que reunió a una conjunción de músicos de buena formación y fundó la jazz band, que llevaba el nombre de su director.

También actuaría en teatros, Café-concerts, y en sitios veraniegos con este conjunto al que denominó en sus comienzos como River Jazz Band, siendo precursor en tal instancia, de este ritmo en Argentina. Las partituras se las propocionaba un pianista ruso que llegó con la famosa bailarina Ana Pávlova, apellidado Lipoff, con quien incluso llegarían a tocar juntos.

En la orquesta de Carabelli se apuntaría como violinista Eduardo Armani en sus comienzos y le serviría de trampolín para proyectarse en ese ritmo -previo paso por el tango- años más tarde. Armani también había integrado la orquesta de Lipoff acompañando a la Pávlova. La orquesta de Carabelli pasó a grabar en el Sello Electra, de Alfredo Améndola (tío de Juan D'Arienzo) y de allí saltaría a la RCA Victor, que inicialmente lo contrató como asesor artístico.

                                   
Carabelli está sentado detrás de Vardaro, entre Petrucelli y Ciriaco Ortiz


En la medida que Carabelli fue demostrando su capacidad musical, y dado el auge que comenzaba a tener el tango en esos momentos, le encomendaron la formación de una Orquesta Típica. Fue allí donde el hombre supo escoger entre los más capacitados ejecutantes de aquel momento para conformar el conjunto que bajo su nombre o como Típica Victor, dejaría una larga colección de títulos, con diferentes integrantes y directores. Carabelli no abandonaría el jazz, pero al tango le daría un barniz progresista y la prueba está en esos discos que siguen alimentando el alma y los pies de los bailarines.

Ya Julio De Caro había comenzado con la jerarquización del tango y Carabelli supo aportar sus grandes conocimientos musicales para extirpar del género a los intuitivos, dándole paso a los músicos bien formados. Por esa orquesta, que nunca acatuó en público,  pasaron nombres como los de Elvino Vardaro, Luis Petrucelli -que le sucedería en la conducción del conjunto- Ciriaco Ortiz, Federico Scorticati, Carlos Marcucci, Pedro Laurenz, Manlio Francia, Agesilao Ferrazzano, Aníbal Troilo, Cayetano Puglisi, Eugenio Nóbile, Orlando Carabelli (hermano de Adolfo), Mario Maurano y otros.

                                               


Tenía 41 años, cuando Adolfo Carabelli se retiró de la RCA y de las actuaciones para recluirse en su domicilio de San Fernando, donde montaría un conservatorio, del cual saldrían pupilos como su vecino Francisco Pracánico. Alejado del público, de las orquestas y del éxito por un problema personal que no pudo resolver, moriría joven con 47 años, olvidado por la gente, pero con el recuerdo permanente de los músicos que lo conocieron y trataron. Su legado sirvió de modelo para posteriores generaciones cuando el tango entró en la senda de la perdurabilidad.

Hoy quiero recordarlo con dos temas de la Típica Adolfo Carabelli. En primer término, Inspiración, de Peregrino Paulos y Luis Rubistein, cantando Alberto Gómez. Lo grabaron el 17 de junio de 1932.  Y a continuación de Arturo De Bassi, El caburé, registrado ese mismo año. Vale la pena acotar que estos temas los grababa a la par de música de jazz, pasodobles y páginas de otros géneros.

19- Inspiración - Adolfo Carabelli-Alberto Gómez

13- El caburé - Adolfo Carabelli

3 comentarios:

  1. jose maria uno de los dos carabelli reemplazo a goñi en el interin antes de basso por poco tiempo cual de los dos adolfo o el hermano? saludos juan esto lo lei alguna vez

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  2. Juancho: No tengo la menor noticias al respecto. Adolfo se retiró en 1940 y murió en el 47 y su hermano Orlando era contrabajista. Es la primera vez que escucho este dato. Salute.

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  3. lo lei en la revista los grandes del tango en el estudio de la trayectoria de la tipica victor hace tiempo y tenia dudas de cual de los dos pero ahora rememorando recuerdo que era adolfo debe haber sido en el lapso que goñi no estuvo hasta la llegada de basso si bien tambien se afirma que piazzolla tambien lo reemplazo cuando el pulpo se bandeaba de copas y otras yerbas saludos juan

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