domingo, 27 de julio de 2014

Manzi en valsecitos

El primer vals porteño lo compuso Homero Manzi (Homero Nicolás Manzione), cuando tenía apenas 14 años. Lo tituló ingenuamente: ¿Porqué no me besas?. El autor de la música fue un bandoneonista de Boedo, muy querido en el ambiente, Francisco Caso, aunque le pusieran el seudónimo increíble de Basura.

Las peripecias de la vida, las casualidades, el destino, quisieron que fuera precisamente Caso, músico de la guardia vieja, quien presentara a una pareja indisoluble: Troilo y Manzi. Dos compadres en el mejor sentido. Dos hombres que se admiraban mutuamente y que producirían páginas memorables.

                                         
                             

Pero hoy estoy con los valsecitos, quizás porque  es domingo, el sol del 27 calienta lo suyo, la piscina me está esperando y mientras tanto le doy cuerda a la vitrola, a los recuerdos y los valsecitos me impregnan su contagiosa alegría. Hasta los bailo solo porque te llaman a la pista, como los pájaros a sus hembras en primavera cuando están en celo. Y como vivo pegado a un parque también conozco esas llamadas de amor.

               


La vida de Homero Manzi fue breve, apenas 43 años y medio, pero le dió tiempo para ser periodista, glosista, político (uno de los fundadores del mítico grupo FORJA dentro del radicalismo), guionista y director de cine, uno de los creadores  del legendario sello Cinematográfico Artistas Argentinos Asociados, gremialista y autor de una parva maravillosa de tangos, valses y milongas.

Repito que hoy escuccho varios de sus  valsecitos, me acuerdo de algunas de sus creaciones y la lista es impresionante. comenzando por Desde el alma al que le introdujo nueva savia, cuando le puso distinta letra para una película. O Ensueño, ese tema que hizo con Antonio Sureda, que me trae tantos recuerdos de mi niñez y adolescencia y que era inevitable cuando en los casamientos sonaba el llamado: ¡Que bailen los novios!

Y repaso: Esquinas porteñas, con Piana,  que alguna vez me hace lagrimear. A su memoria con Sureda, Tu pálida voz, con Charlo. Romance de barrio, con Troilo. Parece mentira, con Francisco Canaro, que Nelly Omar -su fallido amor- reverdeció, cantando en el Luna Park al cumplir los 100 años de edad. Llorarás llorarás, con Hugo Gutiérrez. Paisaje, con Piana. Volverás, ¿pero cuando?, con Sebastián Piana. Un instante, con Hugo Gutiérrez, que es un llamado de amor incendiario, Páginas bellísimas, imperecederas, luminosas. Como el Valsecito de antes que hizo con Antonio Sureda. O Un día llegará, con Carlos Di Sarli.

                                         



Y Una vez en la vida, con Mario Maurano y Alfredo Malerba, otro silbido de amor: "Llegarás, ya lo sé, / llegarás a mi lado una vez. / Llegarás y después / partirás para siempre tal vez. / Una vez, nada más, / una vez en la vida vendrás..... Reclamo que vuelve en  Lluvia  con los primos Pedro y Ángel Maffia. "Volverás otra vez del recuerdo / al nidal de mi fe desolada, / y estará tu canción amarrada / con hilos de lluvia que llora mi amor..".

Homero decía: "Los temas de mis canciones son siempre recuerdos personales. Me resulta difícil escribir fantasiosamente. No tengo ese don". Entonces me pongo a bucear en esas letras sublimes, bien adobadas musicalmente, indagando en sus aventuras, escarceos sentimentales tan bien descritptos poéticamente. Y mi mente gira con los valsecitos. Como hice anoche con dos de ellos, precisamente.

En otra oportunidad este hombre de letras confesó: "Por eso yo, ante ese drama de ser hombre del mundo, de ser hombre de América, de ser hombre argentino, me he impuesto a la tarea de amar todo lo que nace del pueblo, de amar todo lo que llega al pueblo, de amar todo lo que escucha el pueblo."

                                  


Y vaya si lo demostró. Con el bandoneonista rosarino Félix Lipesker pergeñaron unas exquisteces  en ritmo de vals: Tu nombre, Más allá, Muchacha, Los dos, y los que milongueé anoche: Romántica compuesto en 1938.: "Romántica incurable, te recuerdas? / esa noche en las luces de la fiesta / nos juramos amor, mientras la orquesta / lloraba en las cadencias de aquel vals...".

Tuvo un éxito impresionante de ventas y al año siguiente lo completaron con Gota de lluvia, otro ramillete de bellezas: " Las sombras de la tarde vendrás trayendo tu evocación / Las voces de la brisa dirán tu nombre como un rumor, / en el jardín del alma renacerá una flor / y temblarán las manos al presentir tu amor...". Qué fuerza, qué alma.

Escuchamos Romántica por Francisco Canaro, cantando Roberto Maida, grabado el 22 de agosto de 1938. Y Gota de lluvia por Francisco Lomuto, con la voz de Jorge Omar, grabado el 10 de enero de 1939.

Romántica - Francisco Canaro - Roberto Maida

210- Gota de lluvia - Francisco Lomuto-Jorge Omar



3 comentarios:

  1. hace dos semanas me mande tres horas a puro valses,pase cuarenta y dos por supuesto que los de manzi estuvieron a la orden la verdad fue un golazo los veteranos y veteranas llamaban lagrimeando el valcesito criollo es el as de espadas en cualquier audicion radial el que mas impacto causo fue vibracioines del alma por pirincho,es que muchos lo bailaron en su fiesta de casamiento y de los que nombraste en tu nota meti varios salute y te envidio hablas que la piscina te espera aqui el ofri me tiene mal,la estufa me espera.....

    ResponderEliminar
  2. Estoy estufo de la estufa, prefiero el calor. Los valsecitos te alegran el alma y en la milonga son como un jardín en flor. Abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Tus poemas son lluvias q caen y limpian altas almas aún humanas. Genio del éter gordo y pibe bueno del buenos Aires de ayer.

    ResponderEliminar