jueves, 4 de octubre de 2012

San Pugliese

Entramos hace unos días en el otoño madrileño, y aunque se trate de la estación quizás más pareja en esta ciudad, por el clima y el solcito que aparece casi a diario, también estamos en la estación de la melarquía o melancolía,  ese estado de ánimo perennizado que nos empuja a escuchar cierta música
adaptable a nuestro placemiento estacional.

Y nada mejor que traer al reproductor a Don Osvaldo, que con esos arreglos tan propios de su equipo, donde a veces cuesta encontrar la melodía, neblinosa, entre la armonía;  en esos arreglos que llevan la marca en el orillo,  nos obliga a aguzar el oído, empujados por el yumbear de la banda.
                                                                                       
En 1982, Pugliese definía así su estilo: "Creo que quienes se identifican con mi música son aquellos que no quieren escapar de la propia identidad. Defendí con todo mi ser el destino de un estilo que no vino del aire. Vino de la historia viva, profunda, la que palpita en cada uno de nosotros; viene de nuestra heredad tan desconocida por tantos. Viene de los artistas que nos precedieron. Hay quienes se encargan todavía de jerarquizar sólo aquello que no es nuestro".

Efectivamente, Don Osvaldo tenía en su inspiración los genes de Bardi, Arolas, De Caro y José Pascual de quien extrajo su tango Arrabal, como bisagra entre la vieja y la nueva guardia del tango. Y cada vez que se presentaba en una milonga, arrancaba indefectiblemente con ese tango.

La orquesta de Pugliese actuando en la Avenida 18 de julio, Montevideo.
Hoy lo traigo en dos versiones: Julie, de su ex bandoneonista Enrique Alessio y Carlitos Lázzari, grabada en 16 de enero de 1958. Y Mi lamento del violinista uruguayo Julio Carrasco que militó durante 25 años en la orquesta del maestro de Villa Crespo.

Don temas a tono con esta mañanita otoñal y que disfruto con el mate en la mano y la mente en alguna de aquellas noches febriles en las milongas porteñas, con la orquesta de San Osvaldo.



El arreglo de Mi lamento está realizado por el propio Carrasco y es una verdadera joyita para enmarcar. Lo grabó el maestro, el 17 de marzo de 1954.

Julie

Mi lamento














3 comentarios:

  1. Este tango es una obra de arte, y es una lástima que no se lo escuche más a menudo.
    Gracias por traerlo de nuevo a nuestra memoria.
    (Y espero que esta vez llegue mi comentario, por algún motivo técnico se han extraviado los anteriores; ojo, el motivo técnico puede obedecer a mis propias limitaciones).

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  2. Este tango es una obra de arte, y es una lástima que no se lo escuche más a menudo.
    Gracias por traerlo de nuevo a nuestra memoria.
    (Y espero que esta vez llegue mi comentario, por algún motivo técnico se han extraviado los anteriores; ojo, el motivo técnico puede obedecer a mis propias limitaciones).

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    1. Gracias Carlos por tu sabio comentario. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Supongo que te referís a Mi lamento. Es un joyita para degustarla relajadamente.

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