Dos joyitas troileanas

A Pichuco le gustó desde el primer día mostrar sus preferencias musicales. Lo hizo al grabar su primer disco de 78rpm. De un lado tenía Tinta verde de Agustín Bardi y del otro: Comme il faut de Eduardo Arolas. Toda una definición de alta tanguidad.

Es cierto que desde aquellos primeros temas en los que Orlando Goñi desde el swing de su piano marcaba el estilo maravillosamente  milonguero de la orquesta de Pichuco, hasta los sucesivos relevos en el dientudo que también sirvieron para darle otro tono a la orquesta, y el enamoramiento del Gordo con los enormes cantores que tuvo, musicalmente fue cambiando.

                                                                
Algunos dirían que, evolucionando, aunque yo creo que Aníbal Troilo mantuvo un sello de distinción hasta el final, por el amor, el cuidado y la profesionalidad que siempre exigió a sus músicos, más allá de su impenitente bohemia. Pero el mayor Troilo milonguero, eso sí, fue el primero. El de Goñi.

Hoy nos deleitaremos con dos Selecciones de tangos que realizara en su día, con temas de los próceres en cuya huella fue fecundando su carrera.

Se trata de Julio De Caro y Eduardo Arolas. Dos muestras muy bien cuidadas y elaboradas que sirven para calibrar la calidad del compositor, el arreglador y la orquesta que los ejecuta.

Grela, Del Priore. L.Federico, De Caro y Roberto Escalada rodean a Troilo.

La Selección de tangos de Julio De Caro, escrita por Julián Plaza en el pentagrama, la grabó Troilo con su conjunto, el 6 de diciembre de 1966. Ya había registrado otro parecido del mismo De Caro en 1952.

La selección de temas de Eduardo Arolas, las grabó en un arreglo de Raúl Garello el 6 de diciembre de 1967. ¿Casualidad en las fechas? Es que Pichuco era obsesivo y detallista. Y cuando le daba la vena, volvía al ruedo de sus nostalgias y sus espiantes.

Vale la pena recrearse en estas dos joyitas tangueras.

Troilo: Selección tangos De Caro

Troilo: Selección tangos Arolas