tag:blogger.com,1999:blog-7165028562675286196.post7278930614440872738..comments2024-03-25T18:02:35.446+01:00Comments on Tangos al bardo: Los Reyes magosJosé María Oterohttp://www.blogger.com/profile/11141271043328455488noreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-7165028562675286196.post-45422818417901292642015-01-08T02:58:28.642+01:002015-01-08T02:58:28.642+01:00Yo recuerdo haber jugado en las canchas de "L...Yo recuerdo haber jugado en las canchas de "La maquina" que estaban al costado de una villa de emergencia en Liniers y en una cancha de la Villa Carlos Gardel en Ramos Mejía., frente a SITAS y nunca tuvimos problemas con la gente del lugar.Por supuesto que también jugué en potreros, donde se instalaban muchas veces circos y en las parroquias del barrio, donde el cura párroco, organizaba torneos de futbol, para acercarnos a la iglesia.Demás estar decir que también jugabamos en las calles y veredas del Buenos Aires de ayer.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7165028562675286196.post-44381196197529842562015-01-07T11:46:11.773+01:002015-01-07T11:46:11.773+01:00Hoy los chicos tienen cualquier cantidad de pelota...Hoy los chicos tienen cualquier cantidad de pelotas de fútbol pero ya no es lo mismo. Las maquinitas electrónicas y la falta de espacios, la enorme cantidad de vehículos cirnculando por las calles, les dejan en segundo plano el jugar al fútbol como nosotros antaño. ¡Cuandos partidos habré jugado en Soldati, el Bajo Flores, Sarandí, detrás de la cancha de Barracas Central...".<br />-Tiempo viejo, caravana fugitiva, ¿donde estás?José María Oterohttps://www.blogger.com/profile/11141271043328455488noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7165028562675286196.post-6898245964950932762015-01-07T01:00:51.606+01:002015-01-07T01:00:51.606+01:00Como no acordarme de mi infancia y los Reyes Mago...Como no acordarme de mi infancia y los Reyes Magos!!!!.La pelota de futbol de cuero muy pesada, con tiento e inflador, que la cuidaba como un tesoro, pasándole grasa que me regalaba el carnicero de la otra cuadra.También los zapatos de futbol duros y de cuero que los lustraba cada tanto y la picardía de jugar en el baldío cuando nos hacíamos "la rata"donde poníamos como arcos los delantales blancos.Ese baldío todo desparejo y poceado donde aprendimos a dominar la pelota y consechar amistades que hasta hoy perduran.Anonymousnoreply@blogger.com